Héctor Llaitul Carrillanca

El 23 de septiembre se llevó a cabo la nefasta operación huracán, una arremetida contra el pueblo mapuche con un fétido aroma a montaje, que nos recuerda a la cacería de anarquistas y okupas para el caso bombas en el año 2009. Esta vez la cacería fue de mapuches, macabro retrato de épocas coloniales.

En un intento mediático desesperado la operación huracán buscaba invisibilizar la  extendida huelga de hambre de los pu peñi del caso iglesias quienes lograron después de 116 días en huelga de hambre y con la presión social ejercida contra el estado, que se retirara la querella por ley antiterrorista, sin embargo la lucha de los cuatro comuneros aun sigue ya que el 10 de octubre sigue la segunda audiencia de preparación del juicio. Con diez ordenes de detención y con un saldo de ocho mapuche detenidos (Héctor Llaitul Carillanca, vocero de la CAM, Ernesto Llaitul Pezoa, Jaime Huenchullán Cayul, Rodrigo Huencullán Cayul, ambos de la comunidad autónoma de Temucuicui, Martín Curiche Curiqueo, detenido en el campamento afuera de la cárcel de Temuco en apoyo a los ppm del caso iglesias, Claudio Leiva Rivera, machi Fidel Tranamil Nahuel y David Cid Aedo) acusados de asociación ílicita terrorista e incendio terrorista, donde la inteligencia policial utiliza burdas pruebas de mensajería instantánea a través de whatsapp y telegram.

Más info: Operación Huracán y Operación Paciencia, la opción de Chile por el terrorismo de Estado.

Ernesto Llaitul Pezoa

En Concepción, en el Penal Bío Bío se encuentran recluidos Héctor Llaitul  y su hijo Ernesto Llaitul quien recién en mayo de este año fue exculpado por porte ilegal de armas de fuego tras estar en prisión preventiva por cuatro meses desde el 27 de mayo del 2016 y posteriormente con arresto domiciliario, dejándose ver la persecución política que vive la familia Llaitul. También se encuentra recluido en el centro peniteciario David Cid Aedo, detenido en Los Ángeles.

Situación de Héctor y Ernesto Llaitul.