Encapsulamiento al Movimiento Mapuche Autonomista y la Comisión para la Paz y Entendimiento: la encrucijada frente a esta nueva zanahoria y nuevo garrote

Jun 7, 2025 | Artículos / Reportajes / Entrevistas


Por: Cheuquelen Ñancucheo

Luego de la elección presidencial a fines de 2021, que terminó con la elección del presidente Gabriel Boric, se estaba a la espera de cual iba a ser la política en materia al conflicto entre el estado Chileno y el pueblo Mapuche. En esa perspectiva, incluso antes que Boric tomara posesión del mando, comenzó con el reclutamiento de personas del mundo Mapuche, sobre todo académicos y académicas, además de otras personas no Mapuche provenientes del mundo progresista quienes comenzaron a realizar una especie de Lobby con diversas comunidades y organizaciones Mapuche para poder conversar y ver de qué forma se podría destrabar o por lo menos tener una nueva relacion entre el nuevo gobierno y el pueblo Mapuche.

Algo que llamó la atención entre las cosas que en el papel sonaban muy novedosos como los futuros diálogos que se denominaría «Koyawtun» el que luego daría pie a la famosa Comisión para la paz y Entendimiento; o también las prácticas mapuche del küme mongen ( buen vivir) el que más tarde sería el plan Buen vivir , el cual en su idea original contemplaba 400 mil millones de pesos de manera anual.

Algo que también llamó la atención frente a esta nueva estrategia del gobierno progresista de Boric fue la seguridad. En una de sus ramas incluía que para lograr lo anterior, había que «encapsular» a los grupos más radicalizados para que de esta forma no obstaculizara el camino a ese Koyawtun y al küme Mongen. Pero ¿Cómo se lograría llevar a cabo ese encapsulamiento? La respuesta se vio y aún se está viendo durante estos casi cuatro años.

Los tres ejes principales que sustentarían la estrategia de el nuevo gobierno que empezó en marzo de 2022 son tres: Plan Buen Vivir, Comisión para la Paz y entendimiento y la Seguridad.

Dentro del eje de la Seguridad estaría la estrategia de encapsular al movimiento Mapuche autonomista; a lo que el gobierno denomina como » Orgánicas Radicales » y a las comunidades en resistencia. Ahora ¿De qué forma? Lo primero fue negarles la existencia de un diálogo, crear diversas leyes que permitan el encarcelamiento de sus dirigentes, criminalizar las acciones legítimas por demanda territorial de los diversos Lof en resistencia y organizaciones Mapuche como lo fue la ley de usurpación en detrimento y como medida de represión a las recuperaciones territoriales y zonas de control territorial que lleva a cabo nuestro pueblo.

Además de lo anterior, un estado de excepción que a la postre se transformó en una ocupación militar permanente a wallmapu la cual se ve reflejada en los más de 600 mil controles de identidad tanto en carreteras como en caminos y sectores aledaños a los territorios en conflicto y que están direccionados simplemente a personas integrantes del pueblo mapuche, dirigentes de comunidades mapuche emblemáticas y a personas que a las policías y al ejército le son conocidas, ya que son ex presos políticos Mapuche o pertenecen algún Lof en resistencia. Los controles militares y de carabineros de Chile no van direccionados al azar o a personas descendiente de colonos, por el contrario van dirigidos en su gran mayoría a personas integrantes del pueblo mapuche.

Durante este gobierno se han aprobado más de 60 leyes de seguridad como la ley anti terrorista; ley del robo de madera ; ley de usurpación; ley contra el crimen organizado; Ley Nain Retamal, entre muchas otras. Lo anterior ha traído como consecuencia que en la actualidad exista alrededor de un centenar de presos políticos Mapuche en diversas cárceles de Wallmapu, además del endurecimiento del régimen carcelario y las sentencias con condenas extendidas de diversos Weichafe, debido a las nuevas leyes y violaciones al debido proceso, acompañada de una política de dispersión de los presos políticos Mapuche como lo es el caso del Werken de la organización Coordinadora Arauco Malleco , Héctor Llaitul Carillanca; el peñi Rafael Pichun Coñonao junto a los peñi del Lof Temu lemu Chico; o también el caso de los peñi AntuLlanca Quidel y Juan Patricio Queipul, este último se encuentra a 350 kilómetros de distancia respecto a su lugar de origen.

También el encapsulamiento se deja ver en el discurso oficial tanto del gobierno como el gran capital que opera en Wallmapu y que son dueños de grandes medios de comunicación, entre ellos la prensa y las redes sociales.

Hoy día se habla de violencia y terrorismo, además de las víctimas de esa violencia «originada por el propio movimiento Mapuche en resistencia». Este concepto de «víctimas» como lo dice la clase política y los distintos gobiernos, tienen una carga de negacionismo porque solo están enfocadas desde un solo lado y son infimas en comparación a la violencia que ha sufrido el pueblo Mapuche por parte del estado de Chile: un crimen de genocidio hace tan solo 140 años y que fue despojado del 95% de su territorio por la fuerza militar de dicho estado.

Inclusive si se compara lo que el estado dice- y que tiene diversos programas como el de apoyo a víctimas de la violencia rural- las víctimas mapuche que han sufrido violencia estatal por ejercer el derecho a la libre determinación que como pueblo nos corresponde amparado en el derecho internacional, superaría largamente a las «víctimas » descendiente de colonos latifundistas durante los últimos 30 años.

Lo que la comisión para la paz recomienda respecto a las Víctimas, es el reconocimiento estas partir del 01 de diciembre de 1997 fecha no casual, debido a que ese día y ese año se produce la quema de tres camiones en Lumaco. Respecto a la fecha de inicio al reconocimiento de las víctimas, es el informe señala:

«EN EL CONTEXTO DE LOS GRAVES HECHOS DE VIOLENCIA RURAL O ACTOS DE CARACTER TERRORISTA OBSERVADOS EN LAS CUATRO REGIONES, QUE HAN CAUSADO LA PERDIDA DE VIDAS HUMANAS, DE BIENES MATERIALES Y LA AFECTACION EN LA VIDA DE LA POBLACION DE DISTINTOS TERRITORIOS A PARTIR DE 1997, LA COMISION RECOMIENDA LA DICTACION DE UNA LEY DE REPARACION INTEGRAL PARA TODAS LAS VICTIMAS DE ESTE CONFLICTO, TANTO MAPUCHE COMO NO MAPUCHE , REAFIRMANDO EL DEBER DEL ESTADO EN EL MANTENIMIENTO DE LA SEGURIDAD DE LA POBLACION» .

Lo anterior no hace más que negar y ocultar el origen de la violencia y la historia, unificando a las víctimas del conflicto entre el estado Chileno pueblo Mapuche, equiparando la violencia del estado Chileno junto a la violencia política que ha ejercido el movimiento Mapuche autonomista, algo incomparable debido a que no se puede equiparar una fuerza monopolizadora y legalizada en contra de un pueblo, incluida la niñez y la adultez de quienes componen el pueblo Mapuche, frente a una violencia que no ha hecho más que una resistencia frente a tanta opresión estatal y capitalista en Wallmapu.

Frente al eje central más importante en cuanto al conflicto estado Chileno- pueblo Mapuche, como lo es la territorialidad, esta comisión realizó un catastro y una estimación de la demanda territorial actual y futura y la categorizó en 4 grupos, donde el grupo N° 1 representa a las comunidades que han realizado el proceso de demanda territorial vía Conadi con aplicabilidad o solicitud presentada hasta la fecha de las recomendaciones de dicha comisión y cuya solicitud está amparada bajo el título de merced, título de comisario, Realengo, entre otros. Ahí la demanda de tierra Mapuche, según este informe, llega a las 377.334 hectáreas. Para ello se ha estimado un monto maximo de $3.266millones de dólares.

Luego se encuentra el grupo N° 2 de comunidades,las cuales se encuentran constituidas hasta el momento del informe de la comision, pero que puedan presentar solicitud en el futuro sobre los títulos reconocidos por Conadi.

En el grupo N° 3 se encuentran comunidades no constituidas al momento de las recomendaciones de la comisión y que en un futuro se constituyan y puedan presentar demanda respecto de los títulos reconocidos por CONADI. Tanto para las comunidades que componen el grupo n° 2 y n° 3 existirá un fondo 605 millones de dólares como máximo .

Finalmente el grupo N° 4 son aquellas comunidades constituidas antes de las recomendaciones y que no tienen título reconocido, para ello la comisión ha estimado un fondo de 129 millones de dólares. En síntesis esta comisión realizó un catastro y un estimativo general de la demanda de tierra en presente y a futuro parcelada en 4 grupos de comunidades, la cual de una estimativo de 486.008 hectáreas de tierra. Para ello propone crear un fondo de dinero cuya cifra máxima sea 4.000 millones de dólares.

Todo lo anterior como manera de cerrar definitivamente la cuestión de tierra y restitución de esta por parte del estado Chileno hacia el pueblo Mapuche.

Leyendo el informe de la comisión llama poderosamente la atención que en ningún momento se refiera a las tierras antiguas, vale decir, desde el tratado de Tapihue en 1825 entre el estado Chileno y el pueblo Mapuche, el cual fue violentamente desconocido a raíz de la invasión militar Chilena en 1862, el que otorgaba autonomía entre los ríos Bio bio y Tolten ,además de soberanía política, jurídica y económica a las autoridades Mapuche que gobernaban ese territorio. Lo anterior, resulta ser la pieza clave para que desde ahí poder empezar a pensar en destrabar este conflicto, por el contrario, estas recomendaciones de la comisión parte casi en su totalidad con los títulos de merced los cuales se entregaron post invasión militar y despojo territorial.

Hoy día ese mismo estado que realizó ese crimen de genocidio en la ocupación militar para la Araucanía 1862-1883; el que nos despojó del 95% de nuestro territorio reduciendo nuestro territorio a comunidades que legalmente fueron denominadas Reducciones; el que su ejército robó cientos de miles de cabezas de ganado; ese mismo estado Chileno, nos viene a imponer de manera verticalista, paternalista y lo que es peor, de manera colonialista, una solución para cerrar de manera definitiva lo que ellos mismos provocaron como estado Chileno. Para esto utilizaron o se prestaron diversas personas Mapuche del mundo político y académicos tanto Mapuche como no Mapuche, pero en todo proceso de paz o de tregua a nivel internacional, se conversa y se dialoga con los verdaderos actores involucrados en en conflicto, inclusive Israel dialoga con Hamas y viceversa para intentar una tregua en ese genocidio el cual como mapuche vivimos hace solo 140 años atrás. Las negociaciones en el proceso de paz en Colombia involucró en terreno neutral conversaciones de igual a igual entre representantes del estado colombiano y representantes de la guerrilla de las FARC. También en el conflicto entre el estado español y el pueblo Vasco, se sentaron a dialogar en diversos países los verdaderos actores de ese conflicto que duró 50 años, representantes de la alta dirigencia de E.T.A. junto a representantes del gobierno y estado español.

En el caso de Wallmapu no es así debido a que el estado Chileno pretende establecer una comisión para la paz y entendimiento con los principales líderes o autoridades del pueblo Mapuche encarcelados como es el caso de Héctor Llaitul condenado a 23 años, 15 de ellos solo por hablar por las demandas del pueblo mapuche bajo la ley de seguridad interior del estado. Además de aquello, la zona de Wallmapu está bajo ocupación militar permanente bajo un estado de excepción de emergencia que ya supera las 3 años. También el asedio a dirigentes, lonkos y werkenes del movimiento Mapuche autonomista que cada vez que hablan intentan encausarlo bajo algún argumento jurídico.

Por lo mismo esta comisión para la paz no tiene credibilidad y es una farsa para los verdaderos actores del conflicto. Lo que el estado Chileno pretende por medio de esta Comisión es decirle al pueblo Chileno y Mapuche, que se han hecho todos los esfuerzos por llegar a un acuerdo en que todas las partes que integraron esta comisión esten satisfechas, pero ¿quienes NO están de acuerdo con dicho informe? Por una parte, la extrema derecha junto al gremio latifundista de la zona representada por el partido republicano; por otra parte, el movimiento Mapuche autonomista, es decir, los dos polos extremos los cuales Chile y el mundo Mapuche no necesita para seguir avanzando en materia de desarrollo.

Con esto lo único que pretenden , es dejar fuera y lo más encapsulado posible a una de las partes y verdadero actor en este conflicto,el movimiento mapuche autonomista y en resistencia.

Por todo lo anterior, resulta perentorio, la unión y la manifestación de esa voluntad colectiva que representa el movimiento Mapuche autonomista tanto en la práctica como en el discurso, en la práctica es oponerse y deslegitimar la futura consulta indígena que se realizará en virtud de esta comisión ya que si se ignora, quedará el camino libre para mapuches interesados y académicos con ansias de figurar.

Fortalecer la voluntad colectiva y el discurso del moviento mapuche es importante debido a que no sólo importa el número de orgánicas o Lof en resistencia; o el número de acciones de violencia politica, sino que también importa cuánta adherencia generan en nuestro propio pueblo y el propio pueblo Chileno, porque la historia nos ha demostrado que cuanta más adherencia hay a la causa Mapuche autonomista, menor es la credibilidad del estado Chileno y su represión. Por el contrario, cuanto menos adherencia y mayor criminalización exista por parte de ambas sociedades hacia al movimiento mapuche, mayor es el crédito para el estado Chileno y argentino para reprimir, encarcelar, matar e intentar borrarnos o asimilarnos como pueblo.

Por lo mismo, afianzar el discurso que sustente la práctica del control territorial y las bases de la autonomía y libre determinación es importante frente a esta nueva Comisión para la Paz y entendimiento, la cual tiene como último fin, afianzar el poder, el colonialismo, la credibilidad y la soberanía del estado Chileno frente a Wallmapu.

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