Durante el fin de semana del 4 y 5 de octubre se desarrolló, en la comuna de Longaví, el 2° Encuentro de Agroecología Campesina en el Maule Sur, una instancia de aprendizaje, reflexión y celebración que reunió a más de un centenar de campesinas y campesinos, y personas de distintos sectores vinculadas a la agroecología, de la región y distintos puntos del país.
Por: CAEL, Centro Agroecológico Longaví
El encuentro es impulsado por el Centro Agroecológico Longaví (CAEL) y en esta segunda versión fue organizado junto a la Escuela Campesina Ismenia Ortiz (Curicó), la Mesa No al Relleno Sanitario (Yerbas Buenas – Villa Alegre), Feministas Autónomas (Concepción), con el apoyo de diversas personas de organizaciones como el Grupo de Acción Comunitaria (Talca), Micorriza Maulina (Linares), JJVV Los Laureles (Longaví), la JJVV Mesamávida (Longaví), Radio Choyún (Colbún), La Campanazo (Talca), Cooperativa Gráfica Ruidosa (Colbún), la Mesa de la Mujer Rural de Longaví y Movimiento acción ciudadana (Cauquenes).
Bajo metodologías de “campesina a campesino” se articuló en torno a dos grandes ejes: “Memoria y Vida Campesina” y “Suelos Vivos y Biodiversidad”, poniendo en el centro la experiencia, los conocimientos y la organización territorial de cada participante.
El primer día se realizó en la Escuela Juan de la Cruz Domínguez de Longaví donde se vivió una jornada intensa y profundamente significativa, la cual comenzó con un desayuno, palabras de bienvenida y canción del encuentro, abriendo paso a los espacios de escucha, diálogo y trabajo colectivo.
Durante la mañana, se realizó un viaje en el tiempo para conocer la historia campesina del territorio chileno, conectando las luchas del pasado con las resistencias del presente. Posteriormente, el público asistente se dividió en grupos para reflexionar colectivamente sobre la vida campesina, compartiendo las vivencias provenientes de cada territorio.
Tras un almuerzo comunitario, la tarde estuvo dedicada a la Lotería Agroecológica, instancia práctica de diagnóstico predial, y a la Feria de los Suelos Vivos, donde se compartieron conocimientos sobre la formación, los microorganismos y fauna que los habitan, la nutrición, el manejo y la interpretación de los suelos, entendiendo su centralidad en la producción de alimentos saludables y en la reproducción de la vida. Además, durante la feria hubo puestos con información de los conflictos socioambientales de la región y estampados de poleras con temáticas del encuentro.
La jornada cerró con un encuentro cultural con música en vivo, comidas tradicionales y una tremenda energía festiva. Nos acompañaron músicos locales como Luchin, Dagobertos (padre e hijo) y Haydeé, desde Talca Muerte a destiempo y desde Concepción la mejor cumbia con La Vendeta Feminista.
Durante el segundo día, las actividades se trasladaron al Bosque Húmedo de Miraflores, para realizar un recorrido por este ecosistema de 7 hectáreas donde resplandece la biodiversidad que sostiene los campos del sector. Este bosque, en proceso de manejo y restauración agroecológica desde hace dos años por el Centro Agroecológico Longaví, se ha convertido en un espacio educativo y de conservación, símbolo del vínculo entre comunidad y sus entornos naturales.
El encuentro se realizó de manera autogestionada, financiada por las organizaciones convocantes, peñas, aportes económicos solidarios y donaciones de alimentos de las y los asistentes, y sobre todo gracias a todas las manos amigas que colaboraron en todo momento previo y durante el encuentro.
El 1° encuentro se hizo el 4 y 5 de marzo del 2023 y la sistematización de lo vivido se encuentra en www.vidacampesina.cl/publicacionescael. La sistematización escrita y el registro audiovisual del 2° encuentro pronto estarán disponibles a través del mismo sitio web.
Este 2° Encuentro de Agroecología Campesina en el Maule Sur reafirma que la agroecología no es solo una forma de producir alimentos, sino una forma de vivir y proyectar horizontes de transformación social, enraizada en la vida y organización campesina, la biodiversidad y el cuidado mutuo.








Palabras de Bienvenida 2° encuentro:
«Con mucha alegría damos inicio a este 2° Encuentro de Agroecología Campesina en el
Maule Sur, un espacio gestado con cariño y compromiso para reencontrarnos entre»
campesinas y campesinos que seguimos soñando con las manos y el corazón puestos en la
tierra en la tarea de recampesinizar la vida.
Abrimos este encuentro, como se abre octubre, con rebeldía e inteligencia, un espacio
organizado durante meses por el Centro Agroecológico Longaví, la Escuela Campesina
Ismenia Ortiz, la Mesa No al Relleno Sanitario, Feministas Autónomas de Concepción y
muchas otras personas y organizaciones comprometidas, como GAC, Movimiento Los
Laureles, JJVV Mesamávida, Gráfica Ruidosa y la Mesa Rural de Mujeres de Longaví.
Agradecemos cada gesto y aporte que nos ha permitido estar aquí.
Esperamos que este confluir de organizaciones y personas del campo nos acerque a
nuestras raíces de manera colectiva, a través de la memoria y valorando la vida
campesina; que podamos reconocerlas y analizarlas en su conjunto, aprender de sus
potencialidades y disfrutar de sus beneficios tanto a nivel colectivo como a nivel personal.
También nos sumergiremos en la vida de los suelos: su formación, microorganismos,
nutrición, manejos y muchas formas de interpretarlos, cuidarlos y protegerlos. Y al terminar,
celebraremos el cierre de este día con una entretenida jornada con música en vivo y ricas
comidas.
Hoy nos reunimos campesinxs, maestras, maestros y aprendices permanentes de la
reproducción armónica y consciente de la vida, quienes nos nutrimos día a día del vínculo
afectivo con los entornos naturales de los distintos territorios que habitamos, quienes
insistimos en el “estar bien” desde lo colectivo, revitalizando saberes ancestrales que
dialogan con los desafíos actuales, para seguir colaborando en el ciclo de la vida.
La diversidad biológica y cultural nos recuerda que son la base de campos y comunidades
saludables: cuanto más múltiples y complementarias son nuestras prácticas, más fértiles y
vivos se vuelven los territorios, manteniéndose fuertes al momento de enfrentar momentos
de crisis. En el ritmo de las labores campesinas comprobamos cómo los logros individuales
que impone el sistema capitalista-patriarcal son pobres y egoístas, mientras que las
apuestas comunitarias nos ofrecen inmensas posibilidades para vivir con sentido, en
abundancia y cuidado mutuo.
Por eso, la integralidad de las luchas en nuestras comunidades se vuelve un pilar
imprescindible para construir los territorios que deseamos. La agroecología solo florece en
la colectividad, manteniendo viva la autonomía campesina en cada conocimiento y práctica,
compartida de forma horizontal y no mercantilizada, honrando lo aprendido del movimiento
latinoamericano “campesinx a campesinx”. El aislamiento y el lucro sólo debilita el horizonte
de recuperar la salud de nuestros pueblos y sus ecosistemas.
Tal como cuidamos la tierra, también debemos cuidarnos entre nosotras y nosotros,
fortaleciendo la salud comunitaria como reflejo de territorios sanos y llenos de vida.
¡POR LA AUTONOMÍA ALIMENTARIA! ¡TIERRAS LIBRES PARA LOS PUEBLOS!»

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