Este domingo 30 desde las 20:00 hrs, y en el marco del Día del Patrimonio, CENTIIR Nahuelbuta y FAMCA realizarán el relanzamiento virtual del documental “Buena Esperanza. Nuestra Historia Nuestra Memoria.”, el cual ha sido restaurado para la ocasión y contará con la participación de tres realizadores de dicha película quienes comentarán la experiencia de lo que fue realizar este documental y el valor de esta pieza audiovisual en la actualidad.

El 23 marzo de este año el documental “Buena Esperanza. Nuestra Historia Nuestra Memoria.” – realizado el año 2008 por el Centro Cultural Clotario Blest de Curanilahue – se liberó por primera vez en internet, en el marco de los ciclos de cine de las “Jornadas por una Nueva Reforma Agraria” organizadas por el centro de estudios CENTIIR Nahuelbuta, en colaboración con los medios independientes Resumen.cl, Somos Noticias, Radio Kvrruf y El Puelche. Hoy, estas mismas agrupaciones en conjunto con el Festival Arte y Memoria del Carbón (FAMCA), invitan a participar de la actividad Patrimonio Audiovisual y Memoria Rural en Curanilahue: Relanzamiento del documental “Buena Esperanza. Nuestra Historia Nuestra Memoria.”. 

La actividad, enmarcada en el Día del Patrimonio Cultural, se realizará este domingo 30 desde las 20:00 y será transmitida vía Facebook Live por las páginas de CENTIIR, FAMCA, Resumen, Somos Noticias, Radio Kvrruf, El Puelche y Radio Pellin Folil. Y consiste en un conversatorio junto a tres de los realizadores del documental: Álvaro Sánchez, actual presidente del Centro Cultural Clotario Blest; Víctor Contreras, entrevistador del documental; y David Valenzuela, realizador audiovisual de la pieza, con quienes se dialogará en torno al rescate del patrimonio audiovisual y la memoria rural de Curanilahue, desde la experiencia de los entrevistados en la realización del documental. Para luego, lanzar una versión remasterizada del documental realizada por Alberto Astorga de la productora audiovisual Tabula Rasa.

Dicho documental trata sobre la historia de Buena Esperanza, un fundo semifiscal dedicado a la producción forestal y agrícola en la comuna de Curanilahue, donde muchas familias habitaron y trabajaron hasta 1980, año en que la dictadura pasó el fundo a manos de Forestal ARAUCO, desplazando a todos sus habitantes al sector urbano de Curanilahue.

La película representa un ejercicio de memoria popular en sí mismo, es registro de cómo el Centro Cultural Clotario Blest rescató testimonios de antiguos habitantes del fundo, fotografías y recortes de prensa de la época, para narrar la historia y la vida rural antes del despojo, junto con los impactos que trajó el desplazamiento forzado por la dictadura. 

Finalmente, tres históricos miembros del Clota reflexionan sobre la importancia de la historia de Buena Esperanza en la memoria colectiva de la comunidad y cómo aprender de aquello para la construcción de organización popular. 

Por último, se plantean dos grandes preguntas: ¿Qué despojos cuenta la memoria rural de estos territorios? y, ¿qué otras historias narra el patrimonio audiovisual de Curanilahue?