Absoluto fue el rechazo de la comunidad penquista a las modificaciones que la Municipalidad de Concepción presentó en la segunda audiencia pública desarrollada dentro del proceso de modificaciones al actual Plan Regulador comunal. La sesión fue celebrada el pasado jueves 13 de junio, a mediodía en el Salón de Honor del municipio penquista. En la concurrida instancia, se dieron a conocer las correcciones a las propuestas presentado por el municipio semanas atrás, para definir este importante instrumento normativo de la comuna, que incluye aspectos relevantes como vialidad, altura de edificación, preservación de áreas naturales, reserva de suelo para viviendas sociales y participación ciudadana.

Como era de esperar, la propuesta no acogió lo que diversas agrupaciones de vecinos y vecinas habían expresado previamente en reuniones con los encargados de su elaboración. Así fue como los y las representantes de más de diez organizaciones sociales allí presentes, como Defendamos Concepción, el Comité de Defensa del Humedal Paicaví, la Junta de Vecinos de la Aurora de Chile, entre otros, alegaron falta de voluntad política para impulsar los cambios que darían real respuesta a las necesidades de la gente y no a los intereses empresariales. Esto a raíz de que la propuesta no plantea soluciones reales a problemáticas que genera la desregulación capitalista en la construcción de ciudad, manifestada de manera más visible en la expansión sin freno de la industria inmobiliaria, la que destruye sitios tan importantes para la conservación de nuestro medioambiente como son los humedales o el Valle Nonguén, deteriorando la calidad de vida de los barrios, demoliendo la memoria histórica de la ciudad para erigir sus monstruos de metal y hormigón. Otra problemática manifestada por la comunidad, y desestimada por la autoridad, es la amenaza latente de incendios generada por las empresas forestales, al no establecerles límites para su instalación en el radio urbano.

Por su parte, los concejales, quienes serán los encargados finalmente de aprobar o no la propuesta de Plan Regulador, se mostraron en general insatisfechos con el plan, pero excusándose (al igual que el municipio) en que la ley vigente los ata de manos para realizar cambios más profundos y les impide que la participación de la comunidad sea realmente vinculante.

Este proceso aún se encuentra en etapa de recibir por escrito las observaciones que la comunidad quiera hacer llegar a la oficina de partes de la Municipalidad, hasta el 28 de Julio. Se espera que durante el proceso existan acciones para presionar a la autoridad comunal y poder generar un Plan Regulador al servicio de la comunidad penquista y no al servicio de las grandes corporaciones.

A continuación presentamos algunos registros de las opiniones que manifestaron los vecinos: