Hoy a las 19:00, la ‎Vocalía de Derechos Humanos, Solidaridad y Conflictos Sociales UdeC‎ , convocó en la plaza de tribunales de Concepción una manifestación POR LA DIGNIDAD DE NUESTROS NIÑOS Y NIÑAS: NO + IMPUNIDAD.

Un par de cosillas respecto al caso SENAME.

Como si el mar se hubiese abierto o los ET bajado a revelarnos la verdad, todo Chile se conmueve con la terrible noticia de que más de 1300 niños y niñas (cifra quizás corta) han muerto bajo la supervisión del sename. Resulta que ahora se enteran de que existen niños pobres en chile, no cuando pasaron en sus endeudados autitos por los semáforos en plena noche, no cuando en un pub en algún «sojo» se acercó uno de ellos a venderles un calendario de «Disney». Resulta que ahora se enteran que el sename tiene más del 90% de los centros de atención en manos de privados inescrupulosos, que en muchas de esas instituciones hay políticos y Lobbistas (muchos de la Nueva Mayoría y de la otra derecha tradicional) muy bien dispuestos llenándose los bolsillos a costa del herario público, sin importarles ni un huevo la vida, rehabilitación y derechos de los niños y niñas, en tanto estos son simplemente población sacrificable: son pobres; a quien les ha importado, ni a usted ni a la clase política, ni menos a la elite empresarial, que hoy miserablemente, en voz del despojador de Piñera pone el grito conmovedor con estos dramáticos casos. Acaso no se enteraron que mueren 50 mil personas en listas de espera, a caso no se enteraron que mueren muchos en los pasillos de los hospitales y clínicas por ausencia de atención, acaso no se enteraron que el Sename existía, especialmente cuando sus funcionarios se movilizaban denunciando esto y muchas otras condiciones paupérrimas. No, en ese momento eran gente que «alegaba», que obstaculizaba el tráfico, que entorpecía el fluido día que todos quieren tener para circular por los Mall, por la televisión o por las redes, espacios donde esos niños cacho no entran ni menos importan. Las niñas arañas no fueron una pelicula espectacular, fueron niñas en riesgo social que escalaban edificios para sobrevivir en aquello que aprendieron y que la sociedad les dejó como herencia: marginalidad, desesperanza y carencia absoluta de derechos. Riesgo social no significa exclusivamente excasez de recursos, significa vivir bajo la maquinaria institucional de un Estado y una sociedad capturada por el neoliberalismo y por una comunidad hipócrita como la chilena, que ante tamañas cifras del horror, contemplan impávidos cómo la muerte sigue siendo una producción de una forma de vida que nos condena diariamente a la más absoluta precarización.